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Una sospecha que crece: Macri pudo ganar con fraude las elecciones de 2015

Alejandro C. Tarruella

Todo comenzó en junio pasado, cuando se reveló que el ex presidente ejecutivo de Cambridge Analytica, Alexander Nix, dijo ante una cámara oculta que su empresa robó datos de Facebook y «trabajó en Argentina» para realizar una campaña “anti-kirchner” para las elecciones presidenciales de 2015.

Escribe Alejandro C. Tarruella

La injerencia corporativa británica estalló en una audiencia de la Comisión de Asuntos Digitales, Cultura, Medios y Deporte del Parlamento británico. El Ceo Nix no quiso dar a conocer el nombre de su cliente y confirmó suposiciones sobre la intervención de Cambridge Analytica en la vida política argentina. El titular de la comisión, Damian Collins, dijo que Nix alcanzó a aclarar que el cliente en cuestión no era Paul Singer.

Sus declaraciones fueron en el marco de la investigación de prácticas comerciales presuntamente delictivas en el uso de ciberdatos por parte de esa empresa. El 21 de marzo Cambridge despedía a Nix, quien sostenía: “Si conoces la personalidad del elector, puedes ajustar mucho más tus mensajes y multiplicar el impacto”. Algo en lo que creen en Cambiemos.

La suposición que existe en Buenos Aires, que es parte de una investigación en marcha, es que Singer pudo ser el impulsor del apoyo a la candidatura de Macri desde su fondo buitre para ser recompensado si alcanzaba la presidencia, cosa que fue una de las primera medidas en el campo de la entrega del patrimonio nacional por parte de Cambiemos.

Resulta curioso que justamente en estos días, cuando tanto el presidente de EE.UU, Donald Trump, como sectores del poder británico, vienen de cargar sobre Macri con el resultado reciente de la caída de Sturzenegger, ya que mantienen diferencias (los británicos con el accionar de los buitres) con el rumbo sin destino del gobierno.

Este año, una cámara oculta de la cadena Channel 4, británica, sorprendió a un directivo de Cambridge Analytica que mencionó a Argentina en un caso de manipulación electoral que abarcada a diferentes países, e incluso la campaña presidencial de Donald Trump. De inmediato, la Cámara Nacional Electoral argentina abrió una investigación de oficio a la que teme el gobierno de Mauricio Macri en medio de su derrumbe en la imagen pública debido a la situación económico-social, el escándalo de los aportes “truchos” en las campañas, que ahora llega a la Capital Federal. Los auditores de la CNE trabajaban hoy en el tema.

Lo que preocupa al gobierno es que si Cambridge Analytica fue parte de la estrategia electoral, debió ser informado a la CNE, cosa que no ocurrió. Y de demostrarse lo que parece muy cercano a comprobarse, podría unirse al “barranca abajo” de los aportes “truchos”.

Nix y dos ejecutivos dijeron a la cámara oculta, con ironía, que habían trabajado en más de 200 elecciones en todo el mundo, entre ellas la de Argentina

Alexander Nix narró a la cámara oculta de Channel 4 los mecanismos que utilizan para manipular a dirigentes políticos, que pagan el servicio, a los votantes. Los detalles de la información fueron publicados por “The New York Times” en los EE.UU y The Guardian” en Londres. Se expresó, entonces, el modo en que la consultora usó información lograda con métodos ilegales sobre usuarios de la red corporativa de uso social para actuar en elecciones presidenciales.

Nix y dos ejecutivos dijeron a la cámara oculta, con ironía, que habían trabajado en más de 200 elecciones en todo el mundo, entre ellas la de Argentina. En el kirchnerismo, por consultas de medios europeos, se señaló que en principio el video no constituía prueba, lo cual es cierto, pero la entrevista en el parlamento británico profundizó la sospecha.

Más denuncias

Amnistía Internacional denunció en un informe que miembros de organizaciones de derechos humanos y periodistas de Argentina han sido víctimas de ataques de cibertropas manipuladas por el gobierno de Macri.  Amnistía analizó 354.000 ciberataques que sufrieron defensores de DD.HH y periodistas entre el 22 de octubre y el 14 de noviembre de 2017, una vez que se produjo el hallazgo del cadáver de Santiago Maldonado en el sur argentino. Atacaban la labor en DD.HH y periodismo. El ministro Rogelio Frigerio se encargó entonces de desmentir lo que ahora aparece como una evidencia.

Rosendo Fraga, titular de la consultora Nueva Mayoría, cercana al gobierno, afirmó ante Univisión de los EE.UU.: “Si se comprobara que (Cambridge Analytica) trabajó para la campaña de Mauricio Macri, el impacto sería mayor, porque es quien gobierna y porque ganó la segunda vuelta por menos de tres puntos”.

Marcos Peña, por su parte, reconoció que la consultora de Alexander Nix, exdirector de Cambridge Analytica, ofreció sus servicios más de una vez y, ante el escándalo, se defendió expresando que no fueron aceptados porque, en el entorno de Macri, “prefieren trabajar con sus propios equipos”. Parece lógico que si, como en el caso de los aportes truchos, los servicios de Cambridge Analytica fueron contratados de modo ilegal, el funcionario no tenga otra salida que no blanquear el servicio.

Ahora, si se considera que Macri ganó el ballotage en 2015 por una diferencia mínima, la Justicia puede revelar lo que sería un escándalo histórico

Se ha establecido que Nix llegó a la Argentina a través de contactos con ciudadanos de nuestro país afincados en Londres. Ahora, si se considera que Macri ganó el ballotage en 2015 por una diferencia mínima, la Justicia puede revelar lo que sería un escándalo histórico. Hay que recordar que en estos días Víctor Hugo Morales insiste en señalar que en esa elección hubo fraude considerable en la provincia de Córdoba.

Seguramente, en los próximos días pueden revelarse hechos que dada su repercusión en Londres y Nueva York, sorprendan porque darían lugar a un retorno a episodios de fraude histórico que parecían superados a partir del 24 de febrero de 1946, cuando Juan Domingo Perón ganó y accedió a su primera presidencia.

Para más datos, la empresa nació en 2013 para incidir en la política estadounidense. Con u$s 15 millones, su principal inversor, el multimillonario Robert Mercer, padrino de Steve Bannon y su portal Breitbart, pertenece a oscuras zonas de la nueva ultraderecha norteamericana.

Consultado por “El País” de Madrid, Christopher Wylie, cerebro de Cambridge Analytica, diseñador del equipo de ciberguerra de la nueva ultraderecha norteamericana, respecto de la incidencia de la empresa en el triunfo de la derecha británica en el Brexit, explicó que fue importante debido a que el referéndum se ganó por menos del 2% de los votos. Macri en Argentina, si fue asistido ilegalmente por Cambridge Analytica, ganó por un margen semejante la elección presidencial de 2015.

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